Hace un par de días estuvo lloviendo todo el día aquí en Zaragoza, fue el típico día nublado y triste durante el cual llueve levemente pero sin parar desde la mañana hasta la noche.
Y una vez más, como casi siempre que el día está así de nublado, me empezó a fallar el nivel de señal de la TDT.
Y es que la televisión digital terrestre (TDT) es uno de esos ejemplos en los que te puedes plantear seriamente si el avance en tecnología trae más ventajas que desventajas…
Porque cuando todo va bien (te llega la señal correctamente) todo es muy bonito, cierto es, mejor calidad de imagen, mejor sonido, más información en pantalla, etc…
¿Pero y cuando todo no va tan bien?.